SOMOS FRANQUICIA
Un eslogan recurrente, especialmente en determinados sectores de actividad, para destacar la no pertenencia de determinadas marcas al sector de la franquicia es "No somos franquicia". En FranquiShop, nos gustaría compartir con vosotros nuestra postura frente a este tipo de campañas que intentan deslegitimar una fórmula empresarial ampliamente implantada en nuestro país.
De un tiempo esta parte, algunas empresas usan la expresión “no somos franquicia” como reclamo publicitario, considerando que, de alguna manera, transmiten un mensaje de mayor solvencia, seguridad o calidad a sus clientes.
Si bien se trata de una práctica legítima, pues se limita a constatar un hecho objetivo en cuanto al modo en que ejercen su actividad, también es cierto que conlleva un cierto tono despectivo respecto a aquellos que han apostado por la franquicia y, desde ese punto de vista y de un modo igualmente objetivo, nos parece una afirmación carente de fundamento y profundamente injusta.
Probablemente, los que lleven un tiempo en el sector de la franquicia recuerden el caso de una conocida cadena de cafeterías que, durante años, proclamó que no era franquicia “para diferenciarse de la competencia”. Hoy en día, esa misma cadena, con más de 100 establecimientos abiertos al público, afirma con legítimo orgullo que “SÍ concede franquicias” porque goza de una marca reconocida, una gestión de los locales consolidada y productos exclusivos.
Los recientes casos de algunas clínicas dentales (que, paradójicamente, no eran franquicias) y, la publicidad en televisión de otra conocida cadena del sector afirmando expresamente que no es franquicia, merecen algunas consideraciones al respecto.
En efecto, podríamos hablar de las ventajas propias del modelo de franquicia, tales como la notoriedad de la marca, la experiencia acumulada por el franquiciador a lo largo de los años, la economía de escala, la publicidad conjunta de la cadena o la posibilidad que ofrece a los emprendedores de crear su propia empresa con notables garantías de éxito.
Igualmente podríamos destacar datos económicos que demuestran la fortaleza del sector, como son contar con más de 65.000 establecimientos abiertos al público, emplear a más de 250.000 personas en nuestro país o facturar cerca de 27.000 millones de euros al año, además de contribuir a la internacionalización de nuestra economía mediante la presencia de marcas españolas por todo el mundo.
Pero en FranquiShop nos gustaría destacar especialmente lo que consideramos que es la principal aportación de la franquicia a nuestra sociedad: la respuesta eficaz a los gustos y necesidades de los consumidores españoles. Todos los datos económicos comentados anteriormente no existirían si la oferta de productos y servicios de las franquicias no correspondiera a las demandas de los consumidores, que libremente optan por las marcas en franquicia dentro de toda la oferta que tienen a su alcance.
Y así, gracias a la franquicia, decenas de miles de personas en nuestro país han tenido acceso a servicios odontológicos de calidad a precios accesibles, en clínicas bien ubicadas, dotadas de los mejores equipos tanto materiales como humanos y con facilidades financieras desconocidas en dicho sector hasta la llegada de la franquicia. En definitiva, la franquicia ha permitido al consumidor español poder acceder a un servicio sanitario que, no hace tanto, estaba reservado a unos pocos.
Pero no ha sido solo el sector de la odontología; el carácter innovador y competitivo de la franquicia y su adaptación permanente a las necesidades de los consumidores han permitido que hoy en día, cualquier consumidor tenga hasta tres pares de gafas por el precio de una. ¿Habría sido esto posible sin la irrupción de las franquicias en el sector de la óptica?
Y así podríamos continuar con el sector de la moda, de la distribución alimentaria, de la restauración, de la perfumería y cosmética, de la enseñanza de idiomas, de las agencias inmobiliarias… y un largo etcétera.
Así que por sus ventajas objetivas como modelo de negocio, por su trascendencia para la actividad económica de nuestro país, por el empleo que genera y, sobre todo, por la satisfacción que aporta a sus clientes en tantos y tantos aspectos de su vida cotidiana, nos sentimos orgullosos de pertenecer a este sector y decimos bien alto que nosotros sí SOMOS FRANQUICIA.